El Congreso, hace unos años, fue una de las instituciones públicas pioneras en el cumplimiento de la Ley 2.479/04 que establece la obligatoriedad de la incorporación de personas con discapacidad en las instituciones públicas. La integración de personas con distintas discapacidades ha abierto grandes desafíos a las distintas dependencias. Así, la BACCN ha asumido con responsabilidad el reto pero, previo a las incorporaciones, ha realizado talleres de música, danza, cuentacuentos y otros a fin de facilitar la ambientación, en la medida de lo posible.
Después de esos talleres hemos escuchado decir a los participantes: “Estoy contento porque aquí nos tratan con respeto”, “Sentimos el cariño de los profesores y de los compañeros”, “Aquí nos sentimos importantes”. Todas estas expresiones reafirman el principio fundamental de toda docencia: la enseñanza es un acto de amor, sólo se puede ayudar a aprender en un ambiente de cordialidad, de mutuo respeto, de aceptación de las posibilidades y de las limitaciones de los implicados, de los educadores y de los educandos.
Nos sentimos felices y satisfechos con estos pequeños logros. Nos motiva de sobremanera para que nos esforcemos día a día a que la Biblioteca sea un espacio de experiencias educativas desde la lectura, los juegos, los audiovisuales, las representaciones, entre otros, de tal manera a acrecentar el crecimiento de los adultos, de los jóvenes, de los niños. Y donde las personas con discapacidades sean siempre bienvenidas.
Santiago Caballero