Emily Dickinson (1830-1886) nació en Amherst, Massachusetts, un pequeño pueblo
agrícola de Nueva Inglaterra; pasó toda
su vida y murió en ese mismo pueblo.
Escribió sus mejores
versos a salvo de interferencias no deseadas, en su cuarto propio, donde
también fue guardando sus reconocidas obras de calidad y belleza. De su autoría
se registran un total de 1.789 poemas, 1.000 cartas, al igual que algunos
fragmentos de textos en forma de notas, recetas o escritos simples.
Sus obras fueron
fielmente guardadas por la escritora, y sólo salieron a la luz luego de su
muerte, tras ser descubiertas por su hermana Lavinia, quien encontró un baúl
que contenía 40 libros manuscritos, que fueron cosidos por Emily, los cuales
estaban compuestos por un aproximado de 800 poemas que ella misma había
seleccionado y agrupado para su propio plan editorial.
Actualmente,
investigadoras como Martha Nell Smith, Ellen Louise Hart o Lyndall Gordon están
desvelando datos que permiten conocer y comprender la vida y la escritura de
Emily Dickinson con todos los matices que contiene una auténtica obra de arte
como la que ella compuso.
Entre algunos nombres de sus obras más conocidas se encuentras las de Cien poemas, la soledad sonora, Los sótanos del alma, entre otros.
El corazón pide placer primero,
después, ser excusado del dolor
y luego esos pequeños anodinos
que ahogan el sufrimiento.
Y luego ir a dormir
y más tarde, si esa fuera
la voluntad de su Inquisidor
el privilegio de morir.
(c. 1862)
y luego esos pequeños anodinos
que ahogan el sufrimiento.
Y luego ir a dormir
y más tarde, si esa fuera
la voluntad de su Inquisidor
el privilegio de morir.
(c. 1862)
Despega la alondra y encontrarás la música
bulbo tras bulbo, revestida de plata
apenas entregada a la mañana de estío
guardada para tu oído cuando el laúd sea viejo.
Suelta la inundación, lo verás patente
borbotón tras borbotón, reservado para ti.
¡Experimento escarlata! ¡Escéptico Tomás!
Ahora, ¿dudas de que tu pájaro fuera real?
(c. 1864)
bulbo tras bulbo, revestida de plata
apenas entregada a la mañana de estío
guardada para tu oído cuando el laúd sea viejo.
Suelta la inundación, lo verás patente
borbotón tras borbotón, reservado para ti.
¡Experimento escarlata! ¡Escéptico Tomás!
Ahora, ¿dudas de que tu pájaro fuera real?
(c. 1864)
TEATRO
En
1976, el dramaturgo norteamericano William Luce; estrenó “La bella de Amherst”
Un
monólogo escénico sobre la poetisa en Broadway y Londres, fue además protagonizada en la TV inglesa por
Clarie Boom.
La
pieza teatral recorrió el mundo, teniendo un gran éxito en la Argentina, en la
década del 80; protagonizada por China Zorrilla. En España fue protagonizada
por Analía Gadé, cabe recordar que la obra fue representada además en EEUU, Washington
y en Amherst.
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