lunes, 16 de marzo de 2020

PREGONES Y PREGONEROS PARA LA PREVENCIÓN

Escrito por: Santiago Caballero 

En gran parte del siglo XX los parlantes instalados en las
torres de los templos o en las plazas públicas eran los
eficaces y únicos pregoneros. Expandían las noticias de
interés para la población como los horarios de las misas y de
otras ceremonias culturales, partidarias, así como los de
otras actividades de interés. Posteriormente, los altavoces
recorrían en carros y luego en coches o camionetas. En
plena Asunción, hasta hoy el sistema es utilizado para los
actos partidarios, para propaganda de los candidatos.

Incluso, siguen las camionetas que pregonan y venden
productos de las más diversas índoles.

Todo lo precedente es tan solo para contarte una gran
sorpresa comunicativa. En plena vigencia de las radios, la
televisión, las redes sociales, en un pueblo de España, la
alcaldía local expandía las determinaciones tomadas a raíz
del Coronavirus y también los sistemas de prevención a
través de los altavoces fijos y de los que recorrían en
vehículos. Maéna. En pleno siglo XXI y lo mismo que en mi
Ybycuí de los años cincuenta.

Pues sí. Lo diga Marito o Francisco o el Gallo Paloma. Pero
no basta. Es necesario el medio comunicacional,
súpernuevo o el de mi pueblo del siglo XX que garantice la
llegada a todos los ciudadanos. Sin excepción. Así,
bienvenidos el parlante y las redes sociales. Porque de ellos
va depender nuestra salud, nuestras vidas. Nuestra
Biblioteca y Archivo Central del Congreso de la Nación opta
por el teléfono y las redes sociales para seguir con su
servicio a la gente, a los estudiantes, a los investigadores.

Otro día te contaré lo que aprendí en Salud Pública de la
mano de una grande: Cinthia Prieto Conti y otros pioneros
como el inolvidable Marcos Aguayo. Pero, otro día. No
quiero interferir en tu cuarentena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario